Por Valeria Ascencio

¿Quién no ha pasado por la gran construcción amarillo ocre en la calle de Hernández Macías? El histórico Centro Cultural Ignacio Ramírez “El Nigromante”, INBA, (conocido como Bellas Artes), originalmente Convento Real de la Concepción (1765). Entre otros muchos usos, fue también escuela para señoritas y cuartel en la Revolución. Hacía año y medio que no se veía movimiento alguno y acaba de abrir sus puertas al público después de la pandemia. Buscamos a Regina López, coordinadora académica del centro para que nos platique cuáles son los planes que tienen para empezar actividades.

Mientras esperamos, percibimos algunos ruidos dentro del recinto: Están retirando algunas piñatas que aún estaban colgadas por las fiestas decembrinas y la gente de mantenimiento barre y trapea cada una de las salas de exposición. El Centro tiene vida de nuevo. Los pájaros parecen haberse dado cuenta.

Reapertura y Planes

“Estuvimos cerrados desde marzo del 2020 por la pandemia. Abrimos los primeros días de diciembre 2021 y estamos poco a poco regresando a nuestras actividades normales. El año pasado tuvimos conciertos navideños con la Orquesta Sanmiguelense y estamos próximos a abrir talleres de formación artística, desde las artes visuales hasta música y estamos viendo la posibilidad de algunos de literatura. Las exposiciones de grabado de Enrique Diaz que habla de imágenes de la pandemia en grabado y la otra de la artista Minerva Cuevas, es una exposición que hace una crítica de la privatización del agua. Esto será entre finales de enero y principios de febrero.”

Medidas

“Toma de temperatura, sanitización de manos y opcional sanitización de cosas personales.

La librería se movió a la sala Literaria. En general se hizo una reasignación de los espacios para la seguridad de todos. Por ejemplo, la planta alta ahora solo es para acceso de estudiantes y colaboradores.”

Aprendimos de la Pandemia

“Fue un golpe haber estado cerrados durante tanto tiempo. Pero hemos estado regresando poco a poco, responsablemente. Hemos aprendido a tener nuevas medidas de seguridad para cuidar a nuestros colaboradores y a nuestros visitantes. Aprendimos que cada uno tiene una importancia distinta y hay que saberla manejar.”

¿Hubo más creación?

“En el teatro salieron muchos proyectos independientes cuyo tema central era la cercanía entre personas.

En el arte, podríamos pensar que la pandemia era un buen motivo para ocultarnos, pero no, los artistas estuvieron creando y cuestionando a dónde nos lleva todo esto de la pandemia. Sí, un ejemplo claro es Enrique Díaz. Él es un artista egresado de la Esmeralda (escuela de Bellas Artes) que maneja imágenes en grabado, pero de temas de la pandemia. El estornudo, la caída e imágenes.

Estamos en una de las salas del Centro Cultural Nigromante, ocupada por la artista Ana Gómez. Hacemos un recorrido visual. La sala está repleta de piezas de cerámica y moldes por todos lados… es extraño, los moldes están expuestos. Y es que los moldes son parte de la exposición. ¿Podríamos decir que es el cóncavo y convexo de piezas cerámicas y otros materiales? El objeto, tanto como el molde, son protagonistas de la exposición, pero ella nos lo explica en sus propias palabras.”