Por Paola Velasco
Fue en el año de 1953 en Guanajuato, cuando Enrique Ruelas, promotor cultural, realizó el montaje de los Entremeses Cervantinos, un homenaje al novelista y dramaturgo español Miguel de Cervantes Saavedra, considerado una de las máximas figuras de la literatura española.
Lo novedoso fue haber realizado esta propuesta en escenarios públicos, en donde la comunidad, los artistas y los visitantes convergen con un solo fin: celebrar la riqueza cultural universal y la diversidad de propuestas artísticas.
Cada año, desde hace cinco décadas, el Festival Internacional Cervantino se lleva a cabo en Guanajuato, estado que impone por su importancia histórica y su belleza arquitectónica. La entidad cuenta con dos distinciones: en 1988 fue reconocida como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, y en 2005 fue designada la Capital Cervantina de América.