Por Ángel Marín Díaz
El fideicomiso es un acto jurídico, de confianza, en el que una persona física o moral, nacional o extranjera entrega a otra la titularidad de unos activos para que ésta los administre en beneficio de un tercero, esto a través de una institución fiduciaria.
Quienes intervienen en un fideicomiso
Fideicomitente: Persona física o moral, nacional o extranjera que constituye un fideicomiso para destinar ciertos bienes o derechos a la realización de un fin lícito y determinado y encarga dicha realización a una Institución de Crédito.
Fiduciario: Es la persona encargada por el fideicomitente de realizar el fin del fideicomiso. El fiduciario se convierte en el titular del patrimonio constitutivo por los bienes o derechos destinados a la realización de tal finalidad.
Sólo pueden ser fiduciarias las instituciones expresamente autorizadas para ello, como Instituciones Bancarias, Instituciones de crédito.
Fideicomisario: Persona física o moral, nacional o extranjero que recibe el beneficio derivado de un fideicomiso. Al fideicomiso se le puede resumir como un “encargo en confianza”, es decir, darle algo a alguien en quien se confía plenamente para que lo administre.
Como ese algo puede ser cualquier cosa, desde un bien inmueble hasta dinero, las opciones o modalidades que presenta el fideicomiso pueden ser prácticamente innumerables, como los siguientes tipos:
- De Inversión. Que tiene por finalidad la inversión de recursos financieros.
- De Garantía. Se emplea para garantizar algún tipo de pago o cláusula de cumplimiento.
- Inmobiliario. Esta modalidad de fideicomiso está dirigida tanto a personas naturales como a personas jurídicas. En la misma, el fideicomitente entrega al fiduciario bienes inmuebles para que éste los de en arrendamiento, venta, permuta, etc., de conformidad con lo señalado en el contrato y transfiera los beneficios netos al beneficiario.
- De Educación. Dirigido a personas naturales. Mediante el mismo el fideicomitente entrega una determinada cantidad de fondos al fiduciario para que éste los invierta, y con el producto se garanticen los gastos de educación de los beneficiarios.
- Testamentario. puede constituirse por contrato o testamento, y solo podrá ser hecho sobre bienes determinados. De esta manera, el fiduciante puede imponer la indivisión de los bienes fideicomitidos durante un plazo a partir de su deceso.
¿Necesito un fideicomiso?
Si requieres de alguna administración de inversión financiera, para garantizar algún tipo de pago o cumplimiento de una obligación, ventas, arrendamientos, permutas, traslados de dominio, algún tipo de seguro, gastos de educación, aportaciones, prestaciones sociales, ahorros, fondos de jubilación, así como cualquier proyecto rentable, inmobiliario, agropecuarios, industriales o algún otro tipo de fideicomiso en el cual el beneficio que deseas le sea entregado a alguna persona física, moral, nacional o extranjera, con la confianza de que a través de una Institución de crédito legalmente autorizada para ello, se cumpla con la encomienda ordenada en el fideicomiso para el cual lo contrates, entonces, si necesitas de un fideicomiso.
Gracias a todos por sus preguntas esta semana, para más información, así como todos los Servicios Legales comuníquese con el Autor:
Ángel Marín Díaz en: info@inmtec.net 415 121 9005 or 415 121 8943